¿Cuántas veces os ha ocurrido que, estando charlando en un bar, tenéis que parar por el ruido ensordecedor que hace la lechera en la cafetera?
Ese ruido se produce al calentar la leche en el vaporizador y se debe a un efecto conocido como cavitación. Este ruido se solventa sacando ligeramente a la superficie la lanza del vaporizador, además, con éste movimiento formamos la crema vaporizada que aporta esa textura tan agradable al café con leche.

Es muy frecuente en hostelería que los camareros no se preocupen por la contaminación acústica, ni tampoco por que la leche tenga esa cremita, que tan rica va a estar luego en el café.